Histórico: científicos descubren microplásticos en restos arqueológicos a 7 metros de profundidad
Recientemente, y por primera vez en la historia, un grupo de investigadores británicos hallaron restos de microplástico en lo que sería un yacimiento arqueológico ubicado a más de 7 metros bajo el suelo. ¿Qué significa esto y qué consecuencias podría acarrear? Descúbrelo a continuación.
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¿Qué es el microplástico?
Para empezar, el microplástico no es más que residuos diminutos de plástico que se generan a partir de la descomposición de estructuras más grandes, tales como botellas o bolsas. Miden menos de 5 milímetros de diámetro y su dispersión en el ambiente se da por diversos factores, que van desde el desgaste natural de los neumáticos de los autos, hasta su vertimiento directo en las aguas de océanos y ríos.
Se cree que su auge data de la década de los 60, que es donde se da el apogeo en la producción de plástico a nivel mundial y también se hallan los primeros residuos en los océanos.
Por primera vez se hallan microplásticos en depósitos arqueológicos
Por lo anteriormente dicho, sabemos que para nadie es un secreto que estos molestos fragmentos de lo que alguna vez fueron herramientas o accesorios son cada vez más abundantes. De hecho, como lo hemos mencionado, se han hallado a grandes profundidades en el océano desde hace décadas, pero lo que descubrieron estos científicos de la Universidad York y la Universidad de Hull, en colaboración con la organización York Archaeology, no tiene precedente alguno.
Su estudio, publicado en la revista Science of the Total Environment, habla sobre 16 tipos de microplásticos identificados en un grupo de muestras provenientes de Wellington Row y el Queen’s Hotel (ambos lugares situados en la ciudad de York), que datan de finales del siglo I y que fueron extraídas en 1980.
Sobre el tema, el prestigioso arqueólogo de la Universidad de York, John Schofield, expresó su total preocupación, pues según él, el hecho de que los depósitos arqueológicos estén contaminados representa un obstáculo gigantesco al momento de extraer información valiosa que estos podrían albergar. Del mismo modo, hace un llamado a replantearnos esto que está sucediendo, puesto que estamos hablando del patrimonio cultural e histórico de la humanidad.
¿Qué consecuencias traería esto?
Pero las consecuencias no se limitan solamente a la contaminación directa de las muestras y ya, sino que, según lo expresado en el estudio y también en un articulo del Conahcyt en México, la presencia de plásticos en ambientes terrestres podría representar un cambio químico en el suelo, lo cual afectaría mucho de aquello que esté bajo y sobre este, por lo que no solo se abre la posibilidad de que los depósitos arqueológicos simplemente no se conserven con los años, sino que muchas especies de plantas podrían estar en peligro. Pero bueno, estas son conclusiones preliminares al respecto, es necesario estar atentos a la información y sus respectivos avances.
Por ahora los expertos han avisado que darán prioridad de estudio a este tema, pues la gran trascendencia que tiene es innegable.
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