¿Por qué algunas nubes son grises?

Algunas nubes son grises, blancas e incluso casi negras. ¿Te has detenido alguna vez a pensar por qué sucede esto? ¿Cuál es la diferencia entre una nube blanca «normal» y las impresionantes y gigantescas nubes de tormenta que se muestran en tonos grises? Hay mucha ciencia detrás de este fenómeno, y vamos a analizarlo.

¿Qué es una nube?

Una nube es un conjunto de pequeños cristales de hielo y gotas de agua muy diminutas que se suspenden en la atmósfera terrestre (principalmente en la troposfera) por su baja densidad.

A diferencia de lo que muchos suelen pensar, las nubes no están formadas por vapor de agua, sino por estas gotas microscópicas de agua y cristales de hielo, que son lo suficientemente pequeños y livianos como para mantenerse suspendidos en el aire.

¿Cómo se forma una nube?

Las nubes se forman gracias a la condensación (paso de estado gaseoso a líquido) del vapor de agua (agua en estado gaseoso) y al descenso de las temperaturas en el aire.

Lo que sucede es que el aire a mayor temperatura tiene mayor capacidad para contener vapor de agua, por lo que cuando se enfría, esta capacidad disminuye, haciendo que el vapor de agua se convierta en agua líquida, justamente de lo que se componen las nubes.

En cuanto a las nubes que también contienen cristales de hielo, esto va a depender nuevamente de la temperatura del ambiente.

¿Qué determina su color y por qué algunas nubes son grises?

El color de la nube es determinado por la cantidad de agua y cristales de hielo que tenga, ya que las microgotas en su interior dispersan la luz.

Esto se debe a que la luz que emite el Sol es en realidad blanca, y nosotros la vemos de diversos colores debido a la interacción con los diferentes medios que encuentra en su camino antes de llegar a nuestra retina. Es similar a lo que pasa con el famoso prisma de Newton, donde notamos cómo una fuente de luz blanca es apuntada hacia el cristal y este la separa en los diferentes colores del arcoíris.

Bueno, pues las nubes hacen algo parecido, solo que con dispersión en lugar de separación. Cuando son livianas, es decir, tienen poca agua, la luz solar es dispersada en todas las direcciones, lo que afecta a todas las longitudes de onda visibles.

En otras palabras: cuando las nubes no están muy cargadas, reflejan todos los colores dentro del espectro visible y se ven blancas.

Por esto ciertas nubes son grises

Contrario a lo que ocurre con las nubes blancas, cuando una nube es muy grande y concentra demasiada agua y fragmentos de hielo en su interior, la mayoría de la luz que recibe del Sol es absorbida y dispersada dentro de la nube. La luz que logra escapar es mucho más tenue, por lo que se perciben como tonos más oscuros.

Es importante destacar que también existen otros factores que influyen en la tonalidad de las nubes. El ángulo del Sol, por ejemplo, es algo a tener en cuenta y lo podemos notar en los atardeceres, donde la luz de nuestro astro rey, al situarse muy abajo en el horizonte, debe atravesar más atmósfera hasta llegar a nosotros, lo que produce colores bastante inusuales, como el rojo.

Pero bueno, eso podríamos abordarlo en una siguiente publicación. Por lo pronto, hemos conseguido comprender las razones por las que algunas nubes son grises.